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Cuando pensamos en malas hierbas, solemos verlas como plantas molestas que compiten con nuestros cultivos. Pero en la huerta valenciana, muchas de ellas son auténticas bioindicadoras: especies que revelan el estado del suelo y pueden ayudarnos a regenerarlo de forma natural.

Descubre cómo desde la Comunidad Valenciana aplicamos la agricultura regenerativa: un enfoque innovador que regenera el suelo, fomenta la biodiversidad y transforma la forma de cultivar alimentos de manera sostenible.